domingo, 29 de marzo de 2015

Hijos Protagonistas Nro. 3 - No Soy un Títere - Usar Sabiamente las Emociones

Hola queridos Padres Valientes!

En la entrada anterior comentamos sobre como ayudar a nuestros hijos a no ser títeres de otras personas, a través de asumir la responsabilidad y el poder de decidir sobre nuestras emociones.

En ese mismo camino quiero compartirles sobre las emociones básicas y para qué se presentan en nuestras vidas, así podemos ayudar de mejor manera a nuestros hijos a hacer un uso constructivo de las mismas.

A lo largo de nuestro día nos vamos enfrentando a diferentes situaciones en las que tenemos que elegir cómo actuar, el botón que dispara la acción es la emoción. Veamos esto con un ejemplo.

Voy conduciendo descuidadamente por la calle, hay tráfico y empiezo a mirar los mensajes en mi teléfono móvil en un momento en que se detiene por completo el tráfico, de pronto siento una estruendosa bocina que activa el conductor detrás de mi, de un salto se me cae el teléfono, empiezo a temblar, no entiendo qué pasa, unos segundos después entiendo que el conductor delante de mi avanzo unos 4 mts. y el de atrás esta ansioso por el espacio que sobra entre este y yo, al reflexionar la "actitud salvaje" del conductor que bocina, empiezo a pensar...esta bestia que se ha creído, por unos pocos metros casi me mata del susto, yo tengo derecho a avanzar cuando me de la gana, que pase por encima si está tan apurado, ....etc...todo esto sucede en pocos segundos en mi mente, al pensar de ese modo mi pecho se expande, mi respiración se precipita, siendo una energía extraña en mis manos y pies, el impulso de salir y ahorcarlo me seduce, me he enojado, y desde mi enojo decido no avanzar y dejar que el salvaje de atrás se muera de la rabia.

Pero, que pasaría si al yo reflexionar del susto, hubiese pensado...que vergüenza me quede despistada leyendo los mensajes, esto no debo hacerlo mientras conduzco, si voy dejando espacios libres otros entraran allí y haré perder al conductor de atrás su oportunidad de pasar antes, de pronto hubiese empezado a sentir culpa por mi conducta inapropiada, y mi decisión habría sido la de avanzar lo más rápido posible e incluso sacar mi mano en un gesto de disculpa.

Entonces, nuestras acciones toman forma en el pensamiento, y son detonadas por la emoción que estos generan en nosotros. Es conveniente entonces entender el papel que las emociones juegan en nuestra vida. Hablemos de las 5 emociones básicas, su uso constructivos y su uso destructivo.



Teniendo en cuenta lo que nos indica el cuadro anterior, ¿qué nos conviene hacer cuándo experimentamos estas emociones?, para usarlas en beneficio propio, les sugiero algunas preguntas que les permitirá orientar sus acciones de manera que traiga beneficio a sus vidas.

  1. Miedo - ¿Qué amenaza percibo en esta situación? ¿Es esta amenaza real?
  2. Amor - ¿Necesito a esta persona/evento en mi vida o me da gusto tener la posibilidad de vivir este momento con esta persona/evento? En el manejo constructivo permitirse disfrutar y compartir el momento sin expectativas.
  3. Tristeza - ¿Para qué esta pasando esto en mi vida?
  4. Enojo - ¿Qué límites se están traspasando? ¿Es correcto este límite personal
  5. Alegría - Permitirse disfrutar el momento, llenarse de energía. Lo que debemos cuidar aquí es que nuestro actuar no traiga consecuencias negativas para nuestra vida.
Entonces, sabiendo esto podemos ayudar mejor a nuestros hijos, ¿cómo podemos ayudarles?. Les sugiero:
  1. Ayudar a sus hijos a nombrar sus emociones, ejemplo: Se que te sientes triste porque no te invitaron a la fiesta.
  2. Permitirles vivir la emoción, darles tiempo para experimentarla. Si hay apertura, intenta que reconozcan las sensaciones. ¿Cómo experimentas este momento de tristeza en tu cuerpo?
  3. Luego de permitirles su espacio para respirar su emoción, conectarlos con la razón. Ejemplo: ¿Para qué podría estar pasándote esto?
  4. Invitarlos a la acción desde la reflexión. ¿Qué quieres cambiar desde esto que te paso?
En mi experiencia, funciona bastante bien con chicos entre los 7 y 12 años aproximadamente, en la adolescencia son más cerrados a permitirnos conversar de este modo con ellos, pero debemos buscar la forma y el espacio adecuado, a veces, usar la experiencia de otros o la nuestra puede funcionar, lo importante es que aprendan a aceptar, reconocer y manejar sus emociones poco a poco.

Igual, nos toca intentarlo, no podemos rendirnos!

Los invito a compartir sus experiencias, así nos ayudamos.

Un fuerte abrazo!




viernes, 20 de marzo de 2015

Mensaje de un Adolescente a sus Padres

Hola! Buenas tardes mis queridos Padres Valientes!


Les quiero compartir este escrito del profesor Silas Barbosa Dias, que me parece reglas básicas para relacionarnos con todos, en especial, con nuestros hijos...a quiénes amamos!

Lo que un adolescente le dice a sus padres:

  • Si Ud. me respeta, yo lo oiré.
  • Si Ud. me oye, yo me sentiré comprendido.
  • Si Ud. me comprende, yo me sentiré apreciado.
  • Si Ud. me aprecia, yo sabré que Ud. me apoya.
  • Si Ud. me apoya en que yo intente hacer nuevas cosas, yo me volveré responsable.
  • Cuando yo sea responsable, yo me iré volviendo independiente.
  • En mi independencia, yo lo respetaré y amaré toda mi vida.
Su adolescente.


Este mensaje nos lanza un reto como padres, pensemos:
  •  ¿De qué manera irrespetamos a nuestros hijos?
  • ¿Qué hacemos a nuestros hijos que no seríamos capaz de hacerlo a un adulto al que respetamos?
  • ¿En qué nos basamos para hacer estas cosas a nuestros hijos?
El Amor empieza por reconocer al otro como una persona tan valiosa como yo mismo, y comportarse con ese otro tal como uno desearía que lo hicieran con uno. Si amamos a nuestros hijos que nos distrae de respetarlos como una persona legitima, a la que, además, tenemos el deber de educar.

A mi me encanta... si deseo que mis hijos me amen y me respeten por siempre, tengo que respetarlos ahora y para siempre.

Un fuerte abrazo!

viernes, 13 de marzo de 2015

Hijos Protagonistas Nro. 2 - No Soy un Títere

Hola! Buenos días!

Hace algún tiempo atrás, cuando mi hijo menor tenía unos 4 años, lo llevaba a su clase de natación, iba peleando con él, para variar en ese entonces, y de pronto se para, se da la vuelta, busca mi mirada y me dice..."me vas a matar de un infacto"...no, no es un error, fueron sus palabras, y por infacto se refería a infarto, con la dificultad que es para un niño de esa edad pronunciar la r.

Quede boquiabierta, luego me empecé a reír, esa minúscula personita con esa frasesota, no podía tener idea ni de lo que decía, cómo iba a saber que eso tenía que ver con un daño al corazón, y menos que podía tener relación con el enojo...no señor, no sabía lo que decía.

Luego me invadió la culpabilidad, ese pequeño niño de tan sólo 4 años de edad, había establecido una asociación entre una emoción y una frase, que yo usaba deliberadamente cuando me enojaba, léase bien...cuando YO me enojaba.

Veamos que hay detrás de este evento, resulta que un niño de 4 años tiene una conducta típica de un niño de 4 años, no quiere ir a la piscina porque quiere quedarse viendo sus tiras cómicas favoritas en la televisión, la Mamá, adulto responsable que "debe" enseñar a ese pequeño niño de 4 años el valor de la responsabilidad, decide llevarlo a pesar de su disgusto a una actividad que ella eligió para él, porque es "bueno" que aprenda a nadar y que se ejercite.

El pequeño niño de 4 años, que no tiene la posibilidad de negarse, va a la clase de natación, pero va enojado, hasta aquí todo parece normal. Lo raro es que él no tiene derecho de ir enojado, debe ir, a pesar de su deseo de quedarse en casa, y, según su Mamá responsable, debe ir FELIZ, la Mamá adulta va todo el camino fregándole la vida por su actitud incorrecta... por favor, ¡¿quién está mal en este historia?!

Luego cuando llegamos a la edad adulta no tenemos ni idea de lo que sentimos, y además nunca somos responsables de lo que sentimos, siempre hay alguien maluco allá afuera que me hace sentir terriblemente y por ello yo hago cosas inadecuadas, pero es culpa del otro.

Si revisamos la historia que les comparto aquí, notaremos dos conductas que tenemos los papás, que consideramos absolutamente normales, y que tienen un impacto muy importante en el enseñar a nuestros hijos a conocer y manejar sus emociones. Por un lado, la frase "me vas a matar de un infarto" coloca la culpa de MI enojo en el otro, que en este caso es un pequeñito que debe creer que él es terriblemente malo por intentar matar a su Mamá. Y por otro lado, le negamos el derecho a sentir y expresar su enojo, con lo cuál el niño empieza a creer que no es bueno sentir enojo, y en el tiempo lo lleva a bloquear la emoción.

Pero, ¿Cuál es el problema con bloquear las emociones? Es posible creer que esto es lo que hay que hacer para vivir en armonía, nada más lejos de la verdad.

Las emociones provienen de una necesidad que tiene la persona en un momento dado, y el reconocerla nos abre la posibilidad de elegir la forma más conveniente de resolver ese momento.

Cuando yo pongo la culpa de mi emoción en la conducta del otro, y desde allí decido mis acciones, le estoy dando al otro la posibilidad de manejar mi vida, en otras palabras, me convierto en el TÍTERE de esa persona. Entonces, si me dicen fea...lloro, si me dicen linda...lo abrazo, si no me invitan a jugar...me aíslo, y así vamos por la vida caminando al ritmo que nos marcan los demás.

Si desde muy pequeños nos enseñarán que nosotros tenemos el poder para decidir cómo sentirnos, el poder para tomar las palabras y acciones de otras personas y decidir si les damos valor o no, qué diferente sería nuestra vida, ¿no lo creen?, yo estoy convencida que así es.

Entonces, la propuesta aquí es que enseñemos a nuestros hijos que tienen ese poder de NO SER TÍTERE de nadie, y elegir responsablemente las acciones que más les convengan.

¿Cómo podemos hacer esto? Yo les dejo algunas ideas, y espero que entre todos nos podamos ayudar...
  1. Cuando hablemos de cómo nos sentimos con algo que paso, usemos el YO. Por ejemplo: Me enoje porque te tardaste 15 minutos en salir del colegio y habíamos acordado que estarías esperándome afuera.
  2. Cuando nuestros hijos expresen alguna emoción, ayudemos a darle nombre y respetemos el derecho a sentir de ese modo. Por ejemplo: veo que estas enojado porque no querías venir a la piscina, lo entiendo, pero es importante que hagas ejercicio y aprendas a nadar, al regresar a la casa tendrás más tiempo para seguir viendo tu programa.
  3. Elijamos nuestras acciones haciéndonos cargos de nuestras emociones. Por ejemplo: si nuestro hijo no cumple con la tarea, conversarlo con él e imponer una consecuencia si es necesario, pero continúe tratándolo con cariño y respeto.
  4. Mostremos que nuestras acciones no dependen de lo que otros hagan. Por ejemplo: si alguien nos atraviesa el carro en la calle, podemos decir... este pobre hombre debe tener una gran emergencia... y seguimos nuestro camino con normalidad.
En otro espacio les compartiré sobre las emociones, su uso constructivo y destructivo, para que podamos enseñara a nuestros hijos a usarlas sabiamente.

Espero que nos compartan otras ideas para enseñara a nuestros hijos a reconocer y decidir sobre sus emociones.

TIP: a veces le muestro a mis hijos la imagen de un títere o le hago con las manos señas como si estuviese manejando un títere, para recordarles que le están dando el poder a otro de elegir sus emociones, claro está, se enojan por lo que yo hago, pero espero que sirva para reforzar el mensaje.

¡Un fuerte abrazo!









jueves, 12 de marzo de 2015

Niños piden libertad...sin arquetipos

Hola! Buen día!

Encontré una imagen que me encanta y se las quiero compartir.



¡¿Qué les parece?¡

¿Han oído hablar de arquetipos? Les comparto la definición de Wikipedia...

Un arquetipo (del griego αρχή, arjé, ‘fuente’, ‘principio’ u ‘origen’, y τυπος, typos, ‘impresión’ o ‘modelo’) es el patrón ejemplar del cual otros objetos, ideas o conceptos se derivan. En la filosofía de Platón se expresan las formas sustanciales (ejemplares eternos y perfectos) de las cosas que existen eternamente en el pensamiento divino. También puede entenderse como una estructura funcional que subyace a la conducta de un individuo, grupo o sociedad en su conjunto, estableciendo una serie de automatismos a los que se responde de forma espontánea. 

Entonces, un arquetipo es como un patrón de comportamiento que determina nuestras conductas. Estos pequeñitos nos dicen que quieren ser libres de esos arquetipos, y esta "protesta pacífica" me lleva a preguntarme...¿de qué otros arquetipos sería bueno que liberemos a nuestros hijos?

Y se me ocurre el arquetipo de El Salvador, ese persona que siempre tiene que hacer cosas por los demás, que la forma de sentirse aceptado y valorado es en base a cuánto hace por los otros, habla en nombre del otro, hace lo que el otro "no es capaz" de hacer, y va contando todo lo que "debe/tiene" que hacer por otras personas, y realmente se siente angustiado por ello; cuando en realidad hacia adentro sólo necesita sentirse amado por quién es, no por lo que hace.

¿De qué otros arquetipos creen Uds. que debemos librar a nuestros hijos?

!Un fuerte abrazo!


sábado, 7 de marzo de 2015

News Republic: Los jesuitas eliminan las asignaturas, exámenes y horarios de sus colegios

Hola! Saludos a todos los padres valientes!

Les quiero compartir un artículo sobre educación, que definitivamente, reta lo que conocemos hoy en día.

Y la verdad, es que yo sigo pensando, si la sociedad que tenemos no es la sociedad que queremos, pero la constituimos personas que hemos sido educadas en sistemas tradicionales y que hemos crecido adaptándonos a las normas de la sociedad, probablemente necesitemos cambiar algo…o no?!


Este artículo es una muestra de un esfuerzo por hacer algo diferente para producir resultados diferentes, los sorprenderá, en especial porque viene de los Jesuitas, quienes se reconocen por la búsqueda de la excelencia en la formación.

http://nr.news-republic.com/Web/ArticleWeb.aspx?regionid=7&articleid=37142947


Un fuerte abrazo!

Yaneth


jueves, 5 de marzo de 2015

Hijos Protagonistas - Nro. 1

Buenos días mis queridos Padres Valientes!

Quiero que hablemos sobre crear hijos protagonistas, creo que hay mucha tela que cortar en este tema, y que podemos hacer un hermoso traje si sabemos cómo cortarla.

Para empezar pongámonos en sintonía con lo que significa ser protagonistas. Lo que dice Wikipedia es:

"El protagonista 1 2 es el personaje principal de un drama o historia. También es el que actúa en las mayores acciones de una historia. Sin el personaje principal la historia no seria interesante, pero también son importantes los personajes secundarios. "

Para nosotros cuando nos refiramos a Hijos Protagonistas, estaremos hablando de esos niños que entienden que tienen la responsabilidad y el poder de ser el personaje principal de su propia historia, pero, hay algo más, ellos escriben esa historia. Sin restar valor a los personajes que lo acompañan en la vida.

¿Qué les parece? Sería súper interesante poder contribuir a que nuestros hijos quieran vivir su vida de esa manera, es la forma en que pueden ser felices.

En los siguientes días quiero que conversemos de varios temas relacionados con  ser protagonistas, para que podamos tener herramientas para ayudar a nuestros hijos en este reto. Por su puesto, va a requerir valor, pero nosotros lo tenemos.

Un fuerte abrazo!

Yaneth